El término “fibras textiles” se refiere a las que se pueden hilar o utilizar para fabricar telas mediante operaciones como tejido, trenzado o fieltrado. El tejido, una de las primeras actividades artesanales ya se practicaba en el neolítico como lo demuestran los fragmentos de fibras de lino hallados en restos de poblados de Suiza.
Las propiedades que van a determinar si una fibra es hilable son su flexibilidad, resistencia, elasticidad y en especial su finura (diámetro) en relación a su longitud.
La clasificación de las fibras se hace dividiéndolas en tres grandes grupos: las fibras naturales, las fibras artificiales y las fibras sintéticas.
Las fibras naturales hacen referencia a todas aquellas que se encuentran en estado natural y que no exigen más que una pequeña adecuación para ser hiladas y utilizadas como materia textil. Estas a su vez se subdividen en tres grandes grupos dependiendo de su procedencia: animal, vegetal y mineral.
Los otros dos grupos de fibras no existen en la naturaleza tal cual, sino que han sido fabricadas mediante un artificio industrial. Las artificiales dotando al material mediante medios físicos con forma de fibra: vidrio, papel, metales. Las sintéticas son fibras manufacturadas químicas, a base de polímeros.
"Para saber más (PDF)"
"Para saber más (PDF)"
No hay comentarios:
Publicar un comentario